CONÉCTATE CON NOSOTROS

Los dirigidos por Guillermo Moser acordaron un aumento del 29,5% que se abonará en cinco tramos

a conducción de la Federación Argentina de Trabajadores de Luz y Fuerza acordó  un aumento del 29,5% en el marco de las paritarias del sector. La mejora salarial será distribuida en cinco tramos de la siguiente forma: Un incremento del 8% retroactivo a marzo, 4% desde abril, 6% a partir de mayo, un 5.5% desde julio y un 6% desde octubre. Asimismo, el secretario General Guillermo Mose informó que firmó con las energéticas una cláusula de revisión para noviembre, mes en la que las partes se comprometen a volver a discutir los salarios de acuerdo al avance de la inflación.

El entendimiento, con vigencia hasta fines de febrero de 2022, se firmó con las autoridades de la Empresa Distribuidora de Energía Norte, de la Empresa Distribuidora de Energía Atlántica, de la Empresa Distribuidora de Energía Sur, de TRANSBA y de la Central Termoeléctrica Guillermo Brown.

Moser señaló que “la negociaciones salariales se hacen complicadas en el marco de una inflación que el Gobierno debe atender para tener previsibilidad” y remarcó que si bien desde el Ejecutivo “hay buenas intenciones, el sector empresarial –sobre todo de los alimentos- sigue con incrementos que no tienen ningún tipo de justificativo”.

Continúe Leyendo

destacada

Trabajadores del Correo Argentino en alerta por falta de respuestas salariales

En diálogo con Mundo Laboral SJ, Darío Molina, secretario general de FOECYT en la provincia de San Juan, confirmó la continuidad del plan de lucha iniciado por los trabajadores del Correo Argentino, ante la falta de respuestas por parte de la empresa en las negociaciones salariales.

El conflicto se intensificó la semana pasada con un paro total de actividades el martes 16 de abril, luego de conmemorarse el Día del Trabajador Telepostal el lunes. Según detalló Molina, esta medida fue parte de una estrategia gremial frente al estancamiento en las paritarias: “Comenzamos un plan de lucha y hasta ahora no hemos tenido ninguna respuesta, ni una señal de la empresa”, manifestó.

Propuesta rechazada y tensiones en aumento

Durante las últimas negociaciones, FOECYT rechazó de plano la oferta salarial de la empresa. Molina explicó que incluso cuando la federación estuvo dispuesta a aceptar la propuesta acompañada de un bono, la empresa tampoco accedió a esa posibilidad. “La compañía se mostró inflexible y no hubo acuerdo. Estamos en un estado de alerta permanente”, remarcó el dirigente.

Actualmente, el gremio sostiene medidas internas que incluyen asambleas en los lugares de trabajo y la movilización de sus afiliados. Sin embargo, no se han anunciado nuevas acciones de fuerza inmediatas. “La situación se agrava cada vez más, pero por ahora no hay paro programado. Todo se decidirá el 24 de abril en el Congreso Nacional del gremio en Buenos Aires, donde participarán representantes de todas las provincias”, detalló Molina.

El encuentro será clave para definir el rumbo del conflicto, ya que se espera que allí se resuelvan las próximas acciones gremiales en caso de que la empresa mantenga su postura.

Continúe Leyendo

destacada

El Gobierno busca consenso con la CGT para implementar cambios laborales

En medio de un clima de tensión entre los sindicatos y el gobierno. El Ejecutivo planea enviar una iniciativa de reforma laboral a la Cámara de Diputados en los próximos meses. La propuesta busca consensuar algunos de los cambios acordados con el Fondo Monetario Internacional (FMI), pero genera preocupación en el sindicalismo.

La reforma laboral es uno de los temas más candentes en la agenda política actual. Según fuentes oficiales, el proyecto contempla cambios en la Ley de Contrato de Trabajo (20.744) para reducir la participación estatal en los acuerdos entre privados. También se prevé la eliminación de la homologación de paritarias por parte del Estado y la optatividad del pago de la cuota solidaria de los sindicatos.

Estas medidas generan preocupación en el sindicalismo, que ve en ellas un ataque a los derechos de los trabajadores. La Confederación General del Trabajo (CGT) ha expresado su oposición a cualquier reforma que debilite la negociación colectiva y la protección de los trabajadores. Según Gerardo Martínez, secretario general de la Unión Obrera de la Construcción (UOCRA), «la reforma laboral es un tema muy delicado y requiere un análisis cuidadoso y un debate informado».

Un enfoque controversial

La propuesta del gobierno ha generado un intenso debate en la sociedad. Por un lado, algunos argumentan que la reforma laboral es necesaria para mejorar la competitividad y la productividad en el país. Según un informe de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), la Argentina tiene uno de los mercados laborales más rígidos de la región, lo que puede obstaculizar la creación de empleo.

Por otro lado, los críticos sostienen que las medidas propuestas beneficiarán solo a los empresarios y perjudicarán a los trabajadores. Según un estudio de la Universidad Nacional de La Plata, la reforma laboral podría generar una pérdida de derechos para los trabajadores y aumentar la precarización laboral.

La informalidad laboral en la Argentina

La situación laboral en la Argentina es compleja. Según la Organización Internacional del Trabajo (OIT), seis de cada diez jóvenes argentinos trabajan en la informalidad. Esto significa que no tienen acceso a los beneficios y protecciones laborales establecidos por la ley. La informalidad laboral es un problema estructural en la Argentina y requiere una solución integral.

Negociaciones y tensiones

El gobierno ha expresado su intención de dialogar con la CGT y otros sectores para consensuar la reforma laboral. Sin embargo, las tensiones entre el Ejecutivo y los gremios son evidentes. El paro general realizado recientemente es un ejemplo de la oposición sindical a las políticas gubernamentales.

Continúe Leyendo

destacada

El Gobierno lanza una ofensiva judicial contra los sindicatos

El Gobierno nacional presentó denuncias penales contra media docena de gremios por supuestos «atentados», «extorsión» y «coacción» durante el paro general del pasado jueves 10. La medida fue promovida por el Ministerio de Seguridad, liderado por Patricia Bullrich, y se enmarca en una estrategia para amedrentar a los sindicatos que se oponen a las políticas del gobierno de Javier Milei.

La avanzada judicial contra los sindicatos es una clara muestra de la tensión entre el Gobierno y los gremios. Según fuentes judiciales, las denuncias penales fueron presentadas entre el 11 y el 15 de abril por Fernando Soto, director Nacional de Normativa y Enlace Judicial del Ministerio de Seguridad. Los sindicatos denunciados incluyen al Sindicato de Mecánicos y Afines del Transporte Automotor (SMATA), la Unión Obrera Metalúrgica (UOM), la Unión Obrera de la Construcción (UOCRA), el Sindicato Gran Buenos Aires de Trabajadores de Obras Sanitarias y la Unión Ferroviaria.

La estrategia del Gobierno para denunciar a los sindicatos no es nueva. En declaraciones a Radio Mitre, Patricia Bullrich afirmó que el Ministerio de Seguridad había recibido «más de mil llamados» para denunciar a sindicatos por supuestos «aprietes» para parar. Sin embargo, esta táctica ha sido utilizada anteriormente por el gobierno para avanzar con denuncias contra organizaciones sociales y en otras huelgas.

La presentación de denuncias penales contra los sindicatos es un claro ataque a la libertad sindical y a la capacidad de los trabajadores para defender sus derechos. La Confederación General del Trabajo (CGT) y otros gremios han expresado su oposición a las políticas del Gobierno y han denunciado la pérdida de derechos laborales y la precarización del trabajo.

Continúe Leyendo

Tendencias